Mascarilla. Los CDC anunciaron que los vacunados le pueden decir adiós a las mascarillas en la mayoría de las situaciones.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) determinaron este jueves que las personas completamente vacunadas ya no necesitarán la mascarilla en la mayoría de los casos, incluso en lugares cerrados.
La decisión supone un cambio considerable luego de 14 meses en los que el uso de tapabocas era requerido en la mayoría de lugares públicos del país.
El cambio de reglas acerca a la vuelta a la normalidad, aunque los CDC siguen recomendando llevar mascarilla en medios de transporte y algunos lugares donde el contagio puede ser más fácil o poner en riesgo a poblaciones vulnerables.
Las personas vacunadas deberán usar tapabocas y guardar una distancia de seguridad cuando vayan al hospital, a la consulta del médico o a instalaciones dedicadas al cuidado médico a largo plazo, como residencias de ancianos o centros para personas con discapacidad.
También deberán seguir extremando las precauciones cuando viajen en autobús, avión, tren u otros modos de transporte colectivo, así como cuando estén en aeropuertos o estaciones de autobuses.
La Administración de Seguridad en el Transporte le dijo a nuestra cadena hermana NBC News que, de momento, el uso de mascarillas en aeropuertos y aviones es obligatorio al menos hasta el 13 de septiembre.
La recomendación es llevar tapabocas cuando se visiten centros carcelarios, donde hay una población alta de personas, así como en albergues para personas sin hogar.
Otros cambios introducidos en las nuevas directrices de los CDC incluyen que, si está totalmente vacunado y piensa viajar en avión dentro de Estados Unidos, ya no tendrá que realizarse una prueba de COVID-19 antes o después del viaje ni ponerse en cuarentena después de efectuar el viaje.
Para viajes internacionales, los CDC insisten en que “debe prestar especial atención” al lugar de destino antes de abordar un avión o cualquier otro medio de transporte.
A partir de hoy, no necesita realizarse una prueba de detección antes de salir del país a menos que su lugar de destino así lo exija. Eso sí, debe presentar un resultado negativo en la prueba de detección del COVID-19.
Y si ha estado con alguien que tiene COVID-19, no necesita mantenerse alejado de las demás personas o realizarse una prueba de detección a menos que presente síntomas.
Hasta ahora, unos 154 millones de personas han recibido al menos una dosis, pero solo un tercio de toda la población está completamente inmunizada, de acuerdo con los CDC.