Activistas proinmigrantes se movilizan para obtener más votantes jóvenes en las próximas elecciones.

La meta es involucrar a la generación más extensa y diversa en la historia de Estados Unidos en ocho estados críticos, según NextGen America, la organización más grande del país que recluta a jóvenes de 18 a 35 años para participar en el proceso democrático.

El programa consta de una inversión de $32 millones para registrar, informar y movilizar a los jóvenes para el ciclo electoral de 2022 en Texas, Arizona, Carolina del Norte, Pensilvania, New Hampshire, Michigan, Wisconsin y Nevada.

La meta es registrar a más de 288.000 votantes, incluidos 150.000 solo en Texas, y dirigirse a más de 9 millones de jóvenes en otros estados hasta el 2024.

“No estamos cruzados de brazos esperando que la historia cambie en nuestro camino, actuamos para movilizar el poder de los jóvenes estadounidenses a fin de redirigir la aguja de la historia y establecer una nueva dirección para nuestro país”, dijo la presidenta de NextGen America, Cristina Tzintzún Ramírez.

“Nos estamos organizando en los estados de supresión de votantes más grandes del país para empoderar a la generación más extensa y diversa en la historia de Estados Unidos con el objetivo de lograr el cambio que necesitamos”, dijo Ramírez.

De acuerdo con la activista, los eventos en Houston y el Valle del Río Grande, como inicio del movimiento, destaca el compromiso de luchar contra la supresión de votantes diseñado para disminuir el poder democrático de los jóvenes y las personas de color.

Texas, por ejemplo, es el segundo estado más grande del país y, de hecho, el tercer estado con más jovenes en EE.UU y uno de los más diversos. Uno de cada tres votantes elegibles de Texas tiene menos de 30 años y 411.000 tejanos cumplen 18 cada año. Pero el estado también es el lugar más difícil dentro de Estados Unidos para emitir un voto, especialmente entre los jóvenes y los no blancos.

Con la meta de ingresar a este sector al voto, varias organizaciones se unen a la campaña a través del establecimiento de un Comité de Líderes de Texas y creando un equipo de organizadores comunitarios para involucrar a los jóvenes tejanos en sus hogares, escuelas y vecindarios a fin de superar los problemas sistémicos, supresión de votantes y crear poder político a largo plazo.